Este lugar me queda perfecto, siempre tengo todo lo que necesito, wi-fi gratuito en áreas comunes, aparcamiento gratis y un bar al lado de la piscina. Recuerdo que en mi primera estancia el personal me ayudó con el transporte. ¡Volveré en navidad!

Ay, qué maravilla de desayuno! El buffet era un festín con los dulces hechos por la mamá de María, que son pura delicia. Y no puedo olvidar hablar del jardín, un auténtico rincón de ensueño donde pasar un buen rato. La piscina fue la guinda del pastel, perfecta para relajarse después de un día explorando Porreras.

Sin embargo, en esta segunda estancia la cosa se sintió un poco fría y menos personalizada. Aunque María y su equipo fueron muy profesionales al recibirnos, la comunicación fue casi nula después. Haber variado el desayuno para los vegetarianos sería un buen toque.

ideal para paseos por la ciudad y monumentos cercanos

Mi estancia fue genial, ya que pude disfrutar de la belleza de la arquitectura típica mallorquina y además, el hotel está a menos de 5 km de lugares como la Parroquia Nuestra Señora De La Consolación, donde puedes admirar su impresionante fachada y disfrutar de un tranquilo paseo. también está cerca del Santuari de Monti-Sion, un sitio perfecto para perderte un rato en la naturaleza y disfrutar de vistas espectaculares de la zona.

Desayuno decepcionante y sin variedad.

la decoración es bonita, y el jardín podría ser encantador si no hubiera tanta humedad, pero quién necesita eso cuando el wifi casi no llega a la habitación. además, la falta de un servicio de cena nocturna hace que me pregunte si algún huésped se siente realmente especial aquí. casi escribí una buena reseña, pero me fue imposible.

Lo que me habría gustado saber antes

Estuve en un hermoso entorno, pero la falta de aire acondicionado y la conexión Wi-Fi deficiente hicieron mi estancia incómoda. Las habitaciones son pequeñas y el ruido temprano de los animales interrumpe el descanso. Además, el desayuno carece de variedad, lo cual me dejó un poco decepcionada. La atención del personal fue buena, pero creo que hay áreas que necesitan mejora.

Tranquilidad total en la naturaleza

Estuvimos en una habitación hermosa, a pesar de que había bastante humedad, lo cual fue un poco incómodo. La piscina y el jardín están súper cuidados y puedes disfrutar de un aperitivo en el bar al lado de la piscina. La comida fue bastante buena, especialmente la cena vegetariana que nos prepararon. La conexión a internet en la habitación no era buena.

Los jardines están muy bien cuidados, creando un ambiente agradable para pasear y relajarse. La piscina es un buen lugar para descansar después de una jornada explorando.

La habitación tenía mucha humedad, lo que hizo la estancia algo incómoda. La ducha a ras de suelo del baño provocaba que se llenara de agua fácilmente, lo cual no es práctico. Además, el desayuno resultó ser bastante pobre en comparación con las expectativas, careciendo de variedad y opciones de calidad local que habíamos leído.

El entorno es precioso, perfecto para paseos a caballo. La habitación tenía mucha humedad, lo que puede ser incómodo.

Un lugar idílico con una decoración exquisita y un ambiente de paz. La atención del personal es excelente, haciendo que te sientas como en casa. El desayuno es abundante, con productos locales que destacan en sabor y frescura. Sin embargo, el acceso a internet podría mejorar, ya que la conexión es débil en algunas áreas. Además, no todos los espacios comunes son tan acogedores como las habitaciones.

Decoración típica mallorquina, tranquilidad absoluta, jardín cuidado

La falta de aire acondicionado en las habitaciones es un gran problema!!! Además, la conexión Wi-Fi es tan deficiente que parece un chiste. se podría mejorar la variedad de cenas, ya que las opciones son bastante limitadas.

Son Mercadal me enamoró con su exquisita cocina mallorquina. Cada desayuno era una obra de arte, con sabores frescos y locales que despertaron mi pasión por la gastronomía. Un lugar encantador, aunque la conexión wifi podría mejorar, en especial dentro de las habitaciones. Sin duda regresaré para un fin de semana de auténtico placer culinario.